Etapas en las que se divide una obra
A la hora de elegir un lugar nuevo para vivir es importante decidir entre apartamento o casa. Después de esto es esencial escoger el lugar y la empresa constructora que se encargará de la edificación.
Sin embargo, luego de realizar estos pasos deberá esperar un tiempo antes de recibir finalmente su inmueble, ya que la construcción de una vivienda consta de varias etapas, en las cuales intervienen diversas personas, quienes se encargan de que la obra se construya. De esta manera, los planos pasarán del papel a la realidad.
Toda construcción necesita un diseño previo, ya que ésta determina el sistema constructivo que se deberá realizar en el edificio.
Una obra, dependiendo de su magnitud y de las personas que hacen parte de la edificación, puede tardarse entre seis a nueve meses en construirse.
Hay tres aspectos que conforman la construcción de un lugar: son obra negra, gris y blanca. Cada una es determinante en el proceso de iniciación, ejecución y finalización de la misma.
Las etapas
La primera etapa es el esqueleto de la construcción, porque allí se inicia con lo básico. "Se empieza con la búsqueda del terreno para desarrollar la edificación.
Luego se realizan las fundaciones para asentar el edificio, el encargado de esto es el ingeniero de suelos, quien desarrolla un estudio básico acerca de las especificaciones de cómo se deberá construir y determina la capacidad y profundidad para poner las fundaciones", dice Jaime Gaviria, director de proyectos de Arquitectura Natural.
Ya con estos planos estructurales, arquitectónicos y con los estudios de suelos, se inicia la etapa de construcción.
Primero, empiezan las excavaciones y se hacen los trazos del proyecto. En este punto se determinan dónde quedarán las columnas, luego se empiezan las armadas de aceros y se da paso al vaciado del concreto. Finalmente, se realiza la construcción de las losas.
"Después de estos pasos empieza la obra gris, que comprende la adecuación de la parte del cableado y las conexiones de gas, energía, acueducto y aire acondicionado, entre otras", asevera Julián Monsalve, arquitecto y docente de la Universidad Pontificia Bolivariana.
En esta etapa también se incluyen las puestas de muros y el revoque de las superficies. Además se nivelan los pisos y se ubica el techo.
Cuando la obra va en este punto comienza a ser más visible su estructura, sin embargo aún no es un lugar propicio para ser habitado.
Finalmente, con la obra blanca se culmina la edificación. Esta etapa consta del estuco, pintura y la adecuación del lugar, es decir, se instalan los servicios y se culminan los acabados como las puertas, ventanas, griferías, sanitarios y lavaplatos.
También se terminan de instalar los baldosines y se hacen los últimos detalles en el diseño. Es precisamente en este instante cuando se puede habitar el lugar. Y por ende, se disfrutará de un espacio agradable y confortable, ya que la obra está por fin culminada.
Sin embargo, luego de realizar estos pasos deberá esperar un tiempo antes de recibir finalmente su inmueble, ya que la construcción de una vivienda consta de varias etapas, en las cuales intervienen diversas personas, quienes se encargan de que la obra se construya. De esta manera, los planos pasarán del papel a la realidad.
Toda construcción necesita un diseño previo, ya que ésta determina el sistema constructivo que se deberá realizar en el edificio.
Una obra, dependiendo de su magnitud y de las personas que hacen parte de la edificación, puede tardarse entre seis a nueve meses en construirse.
Hay tres aspectos que conforman la construcción de un lugar: son obra negra, gris y blanca. Cada una es determinante en el proceso de iniciación, ejecución y finalización de la misma.
Las etapas
La primera etapa es el esqueleto de la construcción, porque allí se inicia con lo básico. "Se empieza con la búsqueda del terreno para desarrollar la edificación.
Luego se realizan las fundaciones para asentar el edificio, el encargado de esto es el ingeniero de suelos, quien desarrolla un estudio básico acerca de las especificaciones de cómo se deberá construir y determina la capacidad y profundidad para poner las fundaciones", dice Jaime Gaviria, director de proyectos de Arquitectura Natural.
Ya con estos planos estructurales, arquitectónicos y con los estudios de suelos, se inicia la etapa de construcción.
Primero, empiezan las excavaciones y se hacen los trazos del proyecto. En este punto se determinan dónde quedarán las columnas, luego se empiezan las armadas de aceros y se da paso al vaciado del concreto. Finalmente, se realiza la construcción de las losas.
"Después de estos pasos empieza la obra gris, que comprende la adecuación de la parte del cableado y las conexiones de gas, energía, acueducto y aire acondicionado, entre otras", asevera Julián Monsalve, arquitecto y docente de la Universidad Pontificia Bolivariana.
En esta etapa también se incluyen las puestas de muros y el revoque de las superficies. Además se nivelan los pisos y se ubica el techo.
Cuando la obra va en este punto comienza a ser más visible su estructura, sin embargo aún no es un lugar propicio para ser habitado.
Finalmente, con la obra blanca se culmina la edificación. Esta etapa consta del estuco, pintura y la adecuación del lugar, es decir, se instalan los servicios y se culminan los acabados como las puertas, ventanas, griferías, sanitarios y lavaplatos.
También se terminan de instalar los baldosines y se hacen los últimos detalles en el diseño. Es precisamente en este instante cuando se puede habitar el lugar. Y por ende, se disfrutará de un espacio agradable y confortable, ya que la obra está por fin culminada.